¿Por qué?

Según la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación (FAO) mueren cada día alrededor de 25 mil personas a causa del hambre y la pobreza. Estas cifras, bastante desorbitadas, reflejan una problemática que se genera no por la falta de alimentos, sino por la mala distribución que hay de ellos. Algunos restaurantes hacen comida al día, y si sobra, la terminan tirando; las empresas e instituciones que reciben servicios de catering, también. Debemos por ello pensar que existen muchas personas (incluso en nuestras ciudades) que no tienen recursos para poder que llevarse nada la boca y que recurrirán a indagar en los contenedores de basura para buscar aquello que les pueda dar sustento para no morirse, literalmente, de hambre. Otras acuden a bancos de alimentos, donde se les intenta ofrecer los recursos alimenticios más esenciales para los miembros de una familia que viven en un contexto de precariedad económica. ¿Podemos hacernos más conscientes de ello?

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reto 1: Una bolsa de basura, varias comidas

Prueba en un día tirar en una bolsa aparte aquella comida que deshechas y se podría comer (ese trozo de pan que sobró de hoy, ese poco que has dejado en el plato porque no querías comer más, etc.). Además, te pedimos también que en esa misma bolsa deposites aquellas comida que ya "no se puede" comer, porque lleva demasiados días en la nevera, se ha caducado, son "sobras", etc. ¿La bolsa llega al límite?, ¿acaso has necesitado un par de ellas por lo menos? Cuéntanos tu experiencia y súmate al reto. ¡Te impresionarás!

 

Personas que se han unido al reto: 

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reto 2: Mira a tu entorno

Piensa en algún vecino que te haya contado que cada vez le cuesta más llegar a fin de mes o en alguna persona que viva en la calle y ya la "conozcas" del barrio. ¿Estarías dispuesto a comprar alimentos a una persona que lo necesita? Sabemos que a veces tiras comida en buen estado, ¿qué pasaría si en lugar de hacerlo se lo diéramos a alguien que lo necesita?
 

Personas que se han unido al reto: 

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