¿Por qué?

Los ritmos de vida que llevamos en la actualidad nos absorben de tal manera que reducimos nuestras vidas a ir con prisas, trabajar o estudiar, o ambas en el peor de los casos, hasta que al final del día tú único objetivo es cenar y dormir. Así pasan los días esperando a que llegue el fin de semana para poder ponerte al día con todas las cosas atrasadas que se te han acumulado durante la semana o con otras que quieres adelantar, con la optimista pretensión, de que no se te acumulen de nuevo la semana que viene. Frenemos porque acabaremos agobiándonos juntos ¿No estaría bien poder pasar más tiempo con los nuestros en el calor del hogar, mientras se mantiene una de esas conversaciones sobre viejas anécdotas?

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reto 1: NO ES una ANÉCDOTA ES LA ANÉCDOTA

Como en todas las familias, aun con sus lados oscuros que le dan cierto ambiente a las cenas navideñas, están también esas grandes anécdotas y momentos de los que todo el mundo se acuerda, como bien puede ser alguna que otra caída, alguna dentadura que salió en el momento más inoportuno…mi imaginación puede volar e inventar miles de trastadas. Lo interesante, sin embargo, es que seas tú quien realice este reto, que decidas conversar con tu familia para recordar aquellos viejos tiempos y así rescatar de ese baúl viejo y lleno de polvo, la anécdota familiar que os hizo llorar de la risa. Eso sí, luego me la cuentas, que no se te olvide :)

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Personas que se han unido al reto:

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reto 2: UNA COMIDA ESPECIAL

Con las prisas, los diferentes horarios y las peleillas de vez en cuando, ¿cuánto hace que no preparáis algo juntos y disfrutais después del trabajo bien hecho llenando el estómago? Se nos está haciendo la boca agua, reconocelo. La idea, es que con toda la familia, o con algún miembro de la misma, preparéis un plato que os guste y después os junteis alrededor de la mesa a disfrutar de él y de una buena conversación. Acuérdate de no tener el móvil ni a la derecha ni a la izquierda del plato ;)

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reto 3: EXCURSIÓN CAMPESTRE

Se acabaron las reuniones en casa, es hora de respirar juntos el aire fresco. Lo que pretendo en este reto, es que lo paséis no sólo en familia sino también con amigos, recogiendo en algún lugar cercano que se os ocurra, frutos  propios de la temporada, es decir, que si es otoño recogeréis castañas, o nueces etc. es un plan de lo más divertido que además os servirá para valorar todo lo que la naturaleza nos ofrece. ¿Qué haces qué nos estás preparando la mochila para esta nueva aventura en buena compañía?  

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